Para generar empatía en un mundo que se mueve a gran velocidad, debemos comenzar amándonos a nosotros mismos. En la actualidad, donde muchas veces no hay espacio para darse un respiro, cada vez se vuelve más crítico cerrar los ojos, respirar profundo y tomarse el tiempo necesario para cuidarse a uno mismo a través de prácticas que fomenten la salud mental y espiritual. Es sólo a través del amor propio cómo se pueden superar los retos y alcanzar las metas establecidas.
El amor hacia uno mismo, como sea que se considere ese sentimiento, debe ser uno de los pilares fundamentales para todas las personas; no importa de qué país, cultura, nivel socioeconómico, preferencia sexual o religión, ese debe ser el primer paso para lograr un crecimiento como sociedad. Esta premisa se debe dar siempre y cuando ese amor a uno mismo no afecte, de ninguna manera, a un tercero.
El amor hacía uno mismo en época de pandemia
La salud mental y espiritual son parte fundamental en el amor hacia uno mismo y al menos en los últimos dos años hemos visto, y vivido, la importancia de cuidar de ellas de manera habitual . Según un estudio publicado por el Foro Económico Mundial y la Escuela de Salud Pública de Harvard, se proyecta que el costo de las condiciones de salud mental (y las consecuencias relacionadas) aumente a 6 billones de dólares en todo el mundo para 2030. Eso haría que el costo de la mala salud mental fuera mayor que el del cáncer, la diabetes y las enfermedades respiratorias combinadas.
Más que mostrar una pérdida económica, estas cifras son preocupantes porque muestran la importancia de cuidarnos desde el interior, ya que de lo contrario esos problemas pueden escalar a nivel físico y generar problemas de salud. Es por eso que la salud mental se ha convertido en un área de especial preocupación para los profesionales de la salud y los responsables de la formulación de políticas públicas para fomentar el cuidado propio.
En esta nueva realidad, donde los esquemas laborales han cambiado por completo, al igual que la parte familiar donde el home office y las clases virtuales modificaron la vida diaria, el amor por uno mismo debe priorizarse incluso ante el crecimiento profesional, ya que uno no puede funcionar sin el otro. Es un círculo vicioso que de no atenderse puede afectar incluso a el aspecto socioeconómico de todo un país.
Amor propio y las diferentes formas de fomentarlo
Cultivar el amor hacia uno mismo, no es un camino fácil ni puede lograrse de la noche a la mañana; mucho menos es algo que se pueda adquirir a través de un decálogo o consejos sacados de internet. El trabajo para lograrlo depende de muchos factores: de cada persona, de su entorno, cultura, nivel socio económico y principalmente de sus problemas particulares.
Es un hecho que sin importar la forma cómo se busque ese amor propio, en la medida de lo posible es recomendado acercarse con especialistas y profesionales en cada materia. En Casa Ronin entendemos la importancia del amor hacia uno mismo y es por eso que buscamos ofrecer experiencias y proporcionar herramientas de la mano de experto en diferentes técnicas holísticas para lograr ese cuidado personal
Entre las múltiples experiencias que se están generando en Casa Ronin para fomentar el amor propio, la más próxima será el 22 de febrero con una meditación guiada a través del sonido impartida por Andrei Matorini y Coral de la Vega. “Mi música es parte de un camino de sanación. Hacer esta práctica en vivo con la gente ayuda a que los otros puedan conectar consigo mismos”, dijo Matorini.
Así mismo, el 24 de febrero las voces profesionales de Nana Mendoza y Kyla Quinn te llevarán a un viaje de sonidos cósmicos con sus cuencos de cristal, ritmos downtempo y cantos armónicos angelicales. Este encuentro fusiona conceptos de la música contemporánea en un baño de sonido sanador y espiritual, donde la gente podrá reconectarse con el poder de su propia voz, activando el chakra de la garganta y abriendo el círculo para la exploración del sonido.
Finalmente, a partir del 28 de febrero comenzarán a impartirse clases de vinyasa yoga y yoga restaurativo con la maestra Paulina Olavarría. Las personas aprenderán a conectarse con su cuerpo y a utilizar técnicas para lidiar con el estrés. “El yoga puede ser una práctica de autocuidado. En la práctica del yoga uno de los principios es ‘ahimsa’ o no violencia. La no violencia hacia los demás, pero también la no violencia hacia uno mismo. Y desde ahí cuidar nuestro cuerpo, nuestro espíritu”.
Si quieres conocer más sobre Casa Ronin te invitamos a nuestro perfil de Instagram casaronin, donde encontrarán más información y podrás inscribirse a los cursos.
Comenzar por amarnos a nosotros mismos es el primer y más importante paso para generar un cambio en nuestras vidas y en nuestro entorno. En estos días, apostar y luchar por el amor hacia los demás y por el propio a través del cuidado de la salud mental y espiritual, significa un cambio para bien en una sociedad altamente estresada. No importa de qué forma se llegue a esa meta, pero al trabajar en ello, paso a paso, ya se está comenzando a mejorar el mundo.
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