El impacto de la humanidad en el planeta es evidente, ocasionando problemas que día a día crecen y que si no son solucionados ahora, en el futuro serán irreversibles El aumento de la contaminación, la acumulación de basura en los océanos, la escasez de agua, la sobreexplotación de recursos naturales y la deforestación, entre otros, son el resultado de nuestra estancia en este planeta y recientemente se ha descubierto que las personas pueden sufrir secuelas psicológicas, más o menos graves derivadas de la ansiedad provocada por esta situación. Este padecimiento se ha denominado como ecoansiedad.
¿Qué es la ecoansiedad?
De acuerdo con una definición de la American Psychology Association (APA) la ecoansiedad es “el temor crónico a sufrir un cataclismo ambiental que se produce al observar el impacto aparentemente irrevocable del cambio climático y la preocupación asociada por el futuro de uno mismo y de las próximas generaciones”. Y aunque en los últimos dos años, las preocupaciones de las personas se han desplazado hacia la pandemia por el temor a contagiarse y la crisis económica derivada del aislamiento, los problemas climáticos siguen siendo relevantes en la vida de las personas. Más de dos tercios (68 %) de los adultos encuestados por la APA dijeron que tenían “al menos un poco de ‘ansiedad ecológica’” por el cambio climático y sus efectos. Casi la mitad (48%) de los adultos jóvenes de 18 a 34 años dijeron que sentían estrés por el cambio climático en su vida diaria.
A pesar de que la ecoansiedad no se considera aún una enfermedad, la manifestación de este problema se suma a otras afectaciones para la salud mental como la ansiedad, el estrés y más grave aún, la depresión. En ese sentido, según la APA abordar las preocupaciones sobre el cambio climático no se limita simplemente a obtener información. Los médicos también pueden desempeñar un papel importante a la hora de animar a los pacientes a tomar medidas, dicen los expertos. Según la encuesta de la APA realizada en febrero de 2020, 4 de cada 10 personas no han cambiado su comportamiento ante el cambio climático, pero 7 de cada 10 dicen que desearían poder hacer más, mientras que 5 de cada 10 dicen que no saben por dónde empezar.
TOMRA, la protección al medio ambiente y la ecoansiedad
La innovación en la tecnología puede ser una gran aliada para ayudar a revertir las afectaciones al medio ambiente y al cambio climático. De igual forma estas innovaciones pueden contribuir a reducir los niveles de ecoansiedad, ya que cuando las personas se enteren de que empresas u organizaciones están desarrollando soluciones para atender estos problemas, podrían sentirse más aliviadas en ese sentido.
Una de esas empresas que buscan contribuir a solucionar estos problemas como son los residuos del plástico, uno de los mayores contaminantes del océano, es TOMRA que diseña y fabrica tecnologías de clasificación basadas en sensores para el sector mundial de reciclaje y tratamiento de residuos. TOMRA contribuye a evitar que crezca este problema diseñando y fabricando tecnologías de clasificación por sensores para la industria mundial del reciclaje y la gestión de residuos. Cuenta con Collection Solutions que suministra equipos para sistemas de devolución y retorno. De esta forma contribuye con las enmiendas del Convenio de Basilea y la decisión de China de prohibir las importaciones de residuos sólidos y el Pacto Verde europeo, que prohíbe el envío de residuos plásticos sin clasificar a países extranjeros.
A través de un estudio comisionado por TOMRA y dirigido por la consultora EUNOMIA, es posible una reducción de 2,760 millones de toneladas de CO₂/año a través del potencial de un sistema de gestión de residuos optimizado. Esta reducción puede lograrse utilizando sistemas holísticos de recursos, es decir, la combinación optimizada de prácticas clave de gestión de residuos para el acopio, la clasificación y el reciclado, a fin de facilitar la transición hacia una economía circular con la que se evite el agotamiento de los recursos, reduzca la basura y contribuya a un mundo carbono neutro. Los sistemas holísticos de recursos son un marco de combinación ideal de normas políticas que incluyen la responsabilidad ampliada del productor, los sistemas de devolución de depósitos y los procesos técnicos de manipulación de residuos.
Reciclar el plástico para evitar la ecoansiedad
Quizá uno de los materiales que más daño hacen al medio ambiente en el mundo y que podría estar generando mayor ecoansiedad a las personas es el plástico. Una evaluación exhaustiva publicada por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) destaca que el plástico representa el 85% de los residuos que llegan a los océanos y advierte que, para 2040, los volúmenes de este material que fluirán hacia el mar casi se triplicarán, con una cantidad anual de entre 23 y 37 millones de toneladas. Esto significa alrededor de 50 kg de plástico por metro de costa en todo el mundo. Según Inger Andersen, directora ejecutiva del PNUMA, una preocupación importante es el destino de los microplásticos, los aditivos químicos y otros productos fragmentados, muchos de los cuales se sabe que son tóxicos y peligrosos para la salud humana, la vida silvestre y los ecosistemas.
Cómo combatir la ecoansiedad desde casa
De acuerdo con una publicación de Iberdrola, los efectos de la ecoansiedad pueden minimizarse actuando de manera personal con nuestro granito de arena a la hora de cuidar el planeta y ofrece algunos consejos.
Conocer el problema es fundamental y la educación contra el cambio climático debe ser prioridad. Debemos hacer conciencia y hablar sobre la problemática con los demás.
Debemos aportar por un consumo responsable y por el reciclaje para evitar un daño al medio ambiente. Reducir el consumo de plásticos.
Es importante realizar actividades sustentables como montar un huerto urbano o practicar plogging (salir a correr y recoger plásticos del suelo).
Es importante apostar por la movilidad sostenible y por la alimentación sostenible.
Evitar acciones que contaminan como dejar el grifo abierto o tirar un chicle al suelo.
El trabajo de empresas, organizaciones y gobierno para ayudar a revertir y evitar mayores daños al medio ambiente y el cambio climático se vuelve cada día más importante desde el punto de vista como sociedad. Pero incluso cada pequeño paso que damos para proteger al planeta repercute de manera personal y podría ser la diferencia entre que alguien sufra o no de ecoansiedad.