La tecnología y la innovación están en un avance constante, más durante los últimos años y este 2022 ese progreso seguirá en todo el mundo. La tecnología al servicio de las personas ha visto una evolución más acelerada por el aislamiento y acciones como el trabajo remoto o el consumo de bienes y servicios cambiaron definitivamente en muy poco tiempo. Pero a la par de ese proceso de adaptación tan acelerado, la seguridad se ha convertido hoy más que nunca en un factor determinante para dar ese paso. Un ejemplo de esa unión es la implementación de los datos biométricos en el pasaporte electrónico.
Así es el pasaporte electrónico mexicano
La llegada a México del pasaporte electrónico es muy reciente, ya que apenas el 5 de octubre del año pasado, el canciller Marcelo Ebrard Casaubón expidió los primeros pasaportes con estas características en la Ciudad de México y en el Consulado General de México en Los Ángeles, California. La finalidad del pasaporte es proporcionar mayor seguridad para los usuarios, ya que cuenta con un holograma de última generación, un chip con datos biométricos con información personal y una firma electrónica; así como una hoja de policarbonato con la que será imposible suplantar datos o imágenes. Con esta innovación, México se suma a países como Estados Unidos, Alemania, Colombia, Chile o España, donde lleva usándose el pasaporte electrónico desde 2007.
La importancia de este paso en uno de los principales documentos para los mexicanos es que utilizará una de las tecnologías que en los últimos años ha tomado cada vez más relevancia para la seguridad de la identidad digital: los datos biométricos. De acuerdo con una definición de Kaspersky la biometría son las medidas biológicas, o características físicas, que se pueden utilizar para identificar a las personas. Si bien la clasificación de huellas dactilares, el reconocimiento facial y los exámenes de retina son todas formas de tecnología biométrica, también son las opciones más conocidas. Además, según Kaspersky, los investigadores afirman que la forma de las orejas, la manera en que las personas se sientan y caminan, los olores corporales únicos, las venas de las manos, e incluso las contorsiones faciales son otros identificadores únicos.
La importancia de los datos biométricos
La implementación del pasaporte electrónico es un paso más para reforzar la seguridad de todas las personas que cuenten con este documento a través de los datos biométricos, ya que de acuerdo con una publicación de Forbes México, el robo de identidad digital aumenta a gran velocidad día con día, volviéndose uno de los delitos de mayor crecimiento en México y en el mundo en los últimos años. Además, según datos del Banco de México, ocupamos el octavo lugar a nivel mundial con esta problemática. Es por eso que los pasaportes electrónicos al contar con una protección de la seguridad con los datos biométricos, los ciudadanos estarán más protegidos.
En palabras de Ebrard, el nuevo pasaporte electrónico mexicano dificulta la suplantación de identidad de las personas y de manera adicional, en el caso de los pasaportes de menores de edad, se añade una impresión en la primera hoja de papel a color, que contiene la información de quien ejerce la patria potestad sobre el menor de edad. El canciller resaltó esta “innovación”, ya que es el primer documento oficial en presentar dicha información, y protegerá “a los menores, pero también a las personas que tengan discapacidad, que no pueden valerse por sí mismas, ya que quien tenga la tutela podrá aparecer aquí”.
Es probable que la llegada del pasaporte electrónico mexicano haya sido tardía, porque incluso países como Perú o Venezuela ya contaban con este documento; pero finalmente está aquí y es un paso importante para que la tecnología continúe sirviendo a las personas y más en un tema de suma importancia como lo es la seguridad en la identidad digital, que como todo parece indicar será cada vez más importante al paso de los años.