En la actualidad, la tecnología y los negocios avanzan de forma vertiginosa evolucionando en cada país y región. Y todo parece indicar que en los próximos años las empresas y startups deberán contar con un alcance global en su totalidad para poder mantenerse en la carrera cada vez más complicada de captar clientes y conquistar nuevos mercados para lograr el éxito. Como en todos los sectores donde existe competencia, lograr esa internacionalización no es tarea sencilla, ya que se necesita entender cuándo, cómo y dónde mover sus piezas, ya que los cambios globales son constantes, pero complejos. Y si tomamos en cuenta los movimientos en cada uno de los países, la dificultad se incrementa, pero al mismo tiempo las posibilidades de crecer aún más son mejores.
Internacionalización de las startups
De acuerdo con cifras del estudio Perspectivas de la Alta Dirección en México 2021 de
KPMG, nueve de cada diez empresas (87%), ha acelerado el progreso de adopción de
nuevas tecnologías para lograr la transformación digital. Asimismo, el 35% planea expandir su presencia nacional y el 16% expandir su presencia global.
Para afrontar esos retos y sacar ventaja de todas sus virtudes, 47% de las empresas mexicanas (51% empresas grandes, 45% empresas medianas) priorizan contar con el capital humano que tenga las capacidades necesarias para realizar la transformación digital y conducirlos al crecimiento constante.
La tecnología y el talento laboral son dos pilares fundamentales en estos tiempos para llevar a cualquier empresa a desarrollar una estrategia exitosa. Existen dos empresas que hablan de los retos y de las ventajas de la internacionalización de las startups.
Clara, startup latinoamericana que ofrece una solución financiera para la gestión de gastos al interior de las empresas y Deel, empresa unicornio de tecnología de Recursos Humanos que brinda una respuesta a las empresas en crecimiento que están en búsqueda de talento, sabe de la necesidad de que las empresas logren una internacionalización para llegar a más clientes y alcanzar el éxito.
Ambas compañías comparten su visión que tienen, a través de su expertis por el camino que les ha tocado recorrer para llegar a ser un modelo exitoso de negocios, de los retos y ventajas de la internacionalización.
Retos para las startups
Cada vez más la digitalización está retando a las empresas a avanzar vertiginosamente en los negocios de todo tamaño y giro a nivel mundial. Esta aceleración incrementó la necesidad de encontrar talento clave fuera de su país, incluso de su región para seguir con su crecimiento.
Encontrar y formar lazos con aliados estratégicos de otros sectores como objetivo principal de la empresa puede resultar muy complejo, aunque resulta sumamente necesario en estos momentos. Una vez superado ese problema, la relación puede generar grandes frutos a futuro.
El trabajo remoto ha orillado a que las empresas inviertan más en tecnología, un paso complejo si no se tienen los recursos necesarios. Esto es fundamental, no solo para continuar con sus operaciones a distancia, sino para mantener equipos competitivos, seguros y mejor comunicados en un entorno cada vez más digital, si bien la compra de de este tipo de productos se disparó durante 2020, este año se mantiene como una inversión primordial.
Ventajas para las startups
Al internacionalizarse en este contexto hiperconectado digitalmente, las empresas pueden crear equipos con talento proveniente de diferentes países, ahorrando tiempo y dinero en este proceso.
Invertir en soluciones financieras para lograr la internacionalización, más que ser un gasto por parte de las empresas, es una inversión a largo plazo que se traducirá en crecimiento de sus negocios, expansiones y/o desarrollo de nuevos productos, sobre todo para aquellas empresas que no tienen la oportunidad de acceder a productos de crédito que les permitan solventar los gastos.
Implementar soluciones tecnológicas de gestión de gastos corporativos se vuelve clave para reducir las malversaciones de efectivo y recursos dentro de una empresa hasta en un 58%, según estadísticas de KPMG; ayudando además, a que el crecimiento acelerado que llegan a experimentar las empresas no represente una desestabilización financiera y así pueden lograr cualquier meta que se propongan, como la internacionalización.
Todo tipo de empresa, desde la más pequeña hasta los grandes corporativos, tienen en su mente lograr la internacionalización para alcanzar nuevas metas y llevar sus productos o servicios a otras fronteras para obtener más y mejores resultados. Aunque existen retos en el camino, si su objetivo es llegar a otros países, su capacidad de afrontarlos aplicando soluciones creativas, un trabajo constante y una inteligente forma de ocupar sus recursos, les abrirán las puertas para cualquier mercado.
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